Lo que importa es compartir esa semillita de luz que cada ser humano lleva en su interior. Si esa tarea se pone en marcha, se puede decir que la vida dada esta acorde a su función verdadera: descubrir la luz, ser luz y compartir la luz.
¿Como traduzco la Luz? De maneras concretas: escuchar con atención, escuchar en silencio, respetar al otro, acogerme, aceptarme, acoger, aceptar, ser compasiva/compasivo, accionar desde el amor con consciencia (sin miedo, sin apego), accionar hacia, por, para un Bien común. ¿Vivo así? No todo el tiempo, aunque la práctica de la oración, de la meditación, la Vida ayudan a cultivar un modo de vivir consciente, espiritual, es decir, luminoso.
En todo caso, la "importancia" de la gente que sigue "tu sitio" tiene que ver con la propia función del camino: que la luz, de ser posible, siempre llegue a todos.
Abrazo luminoso.

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