Amigarme con el rechazo que surge en mí, me libera...

 

Me conozco en eso que no me sale, en eso que me cuesta, en eso que repito, en eso que rechazo.  Sino lo juzgo y pongo atención, aprendo de ello. El rechazo produce esclavitud a eso que no me gusta, porque como no lo acepto sigue estando ahí. Quizás detrás de mi  rechazo hacia una persona o situación, puede haber miedo,  necesidad de amor, de aceptarme, de NO rechazarme. 

 

Dejar de rechazar trae libertad y  la posibilidad de integrar ese lado con el cual "me peleaba", porque el rechazo se vive como una pelea, como una descarga de tensión que necesita ser expresada, sin embargo, no deja un buen sabor y no cultivo una buena energía conmigo y con los demás. 

Como la energía es invisible suelo creer que mis actos no tendrán impacto o suelo olvidarme de ello. Sin embargo, mis decisiones, mis actos alimentan mi presente y van construyendo mi futuro  😱.  Menos mal que existe el poder divino, la misericordia. 😊🤲

 

En concreto, AMIGARME con el rechazo que surge en mí, me libera, ME AMIGO  conmigo y con los demás. 

Gracias por leer y suscribirse. Abrazo consciente  🤗💜

 

Foto shiny diamonds sitio pexels.