La construcción de la confianza interna

 

 

 Hace tiempo tuve una experiencia y comprendí que cada uno da lo mejor que puede. 

Aprendí que en los conocimientos antiguos, en los libros,  en experiencias que nos dejaron tantas personas por escrito compartiendo su sabiduría de vida, sus recursos, hay mucho por conocer y poner en práctica.  

Creo que es saludable estar atento a las personas que forman parte de nuestras áreas de trabajo, aprendizaje, camino interior, amistad, en el sentido de que lo que recibimos de los otros sea positivo, es decir, aquellos que apoyan nuestras potencialidades,  personas que no compiten con nosotros sino que nos acompañan en nuestro crecimiento.

Personas que si nos dicen algo con sinceridad no sea con la intención de lastimar o porque necesitan decir una verdad que creen absoluta como si fuera la única verdad en el Universo, sino con la intención de aportar cierta apertura en nosotros. Es cierto, todos nos equivocamos aun con buena intención, sin embargo, la buena intención del corazón se siente y la mala intención también.

¿Cuando hay mala intención? Cuando el otro sabiendo que daña lo hace igual.

Creo que es fundamental tener un círculo de gente que respete, valore y sume a que se agrande lo bueno en nosotros,  que crezca nuestra confianza interior. No digo que nuestra confianza dependa de las circunstancias externas o de las personas que nos rodean, sino que sea un espacio de confianza donde desplegar las alas con total libertad. Creo que contar con un círculo de influencia positiva aporta a  nuestro crecimiento interior. 

Gracias por leer. Abrazo luminoso.