Descubro que hay muchos modos de silencio: ambiental
que pone en evidencia el alboroto mental.
También puedo estar en silencio porque
no hablo y no me comunico con los demás, pero que pasa
cuando en el interior ese silencio se siente tirante, forzado?
¿Qué hago? Me sirve caminar, rezar, entregarlo, poner la atención en la respiración,
observar la sensación de tirantez, escuchar videos con información luminosa, consciente.
En todo ese movimiento aparece un volverse humilde y emerge cierta comprensión interior,
y como dice una canción From the Storm de Bob Dylan:
"Cuando la oscuridad es una virtud".
Y claro que lo es porque esa oscuridad silenciosa o silencio tirante,
hizo necesaria la atención u observación consciente y así su transformación
devenida en comprensión, un nuevo conocimiento sobre mi mundo interior.
POEMA del blog:
Me sumerjo en el silencio tirante,
me siento esas aguas oscuras,
y por eso empiezo a nadar,
en ese movimiento profundo emerge la comprensión.
Una luz viene a salvarme.
Una luz viene a salvarme.
Una oscuridad viene a mostrarme la luz.
Gracias por leer. Abrazo luminoso.
Estas palabras tuyas, están nombrando lo innombrable, describiendo lo indescriptible, y así nutriendo mi alma en su totalidad: intelecto y emoción; y mostrando el Camino, ése en el cual nos podemos reconocer Hermanos de un Padre, Destinatarios de una Herencia. Gracias!
ResponderEliminarMuchas gracias por tu comentario que le suma luz al texto. Abrazo
EliminarA mi entender, el silencio tirante hay que sufrirlo, porque en realidad no es silencio, sino ausencia de palabras. Si pacientes esperamos, llegará un momento que esto dará paso a un silencio habitado por la Palabra y eso nos llenará de paz. Cristo te cuide. Un saludo lleno de silencio y paz.
ResponderEliminarGracias por el compartir. Bendiciones
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