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Días de infiernos mentales se han desatado, automatismos, reacciones, una
oscura interioridad se hace visible. Aparece cierta amargura al
observarme en un lugar que creía superado.
Luego de todo el vendaval mental, cierta tristeza al observarlo,
entonces el pedido desesperado de humildad y entregarlo a Dios, al Universo, y rezar.
Algo cambia, aparece cierta claridad, consciencia y comprensión,
ello muestra el camino de lo que aún necesita ser sanado, integrado.
Transcurrido el vendaval mental aparece como una florcita con luz.
El agradecimiento al Universo, a Dios y así recordar que la luz
interior siempre esta ahí.
Gracias por leer. Abrazo con consciencia.
Qué bueno Andrea! Un abrazo!!
ResponderEliminarGracias por leer. Abrazo
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