Foto del blog.
On the road. Alone? Not, with GOD😉
Iniciar un viaje en soledad, largo, breve, cualquiera sea el destino, puede ser un modo
de cambiar las coordenadas automáticas. El viaje propone estar
atento y así descubrir un tiempo interno, quizás poco frecuente en la vida cotidiana.
Ese tiempo es tranquilo, y allí el presente se percibe, entonces tomar un café
en un bar de la ruta puede ser un momento vivido u olvidado.
Lo mas gracioso del viaje "en soledad", es que la Presencia (energía
divina, amor, Espíritu Santo como cada cual lo sienta) acompaña todo el tiempo, y ese es el re descubrimiento mas hermoso.
Es necesario hacer un viaje para descubrirlo? No, sin embargo, retirarse en soledad y por cierto tiempo propician con
intensidad el encuentro.
Gracias por estar ahí. Abrazo luminoso.
Comentarios
Publicar un comentario