Foto del blog: Luján
Despertarse por la mañana y sentirlo en el corazón produce alegría.
Salir al trabajo, caminar para tomar el transporte, esperar
para cruzar la calle, y en ese acto de espera, de detenimiento corporal
algo interior dice y siente Cuando El esta en el Corazón, todo brilla.
El día cotidiano, aparentemente repetitivo, se torna diferente
y entonces cada calle, cada lugar conocido y transitado, incluso el trabajo parecen diferentes,
cobran una Vida que antes no percibía.
La repetición de un mantra - el que cada uno elija- o la repetición de la Oración de
Jesús siento que son como las puertas para encontrar la Vida en lo cotidiano.
Gracias por estar ahí. Abrazo luminoso.
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