La necesidad de decisiones, de cambios profundos requieren energía, concentración, entrega, confianza en Dios, el Universo, como cada cual lo conciba. En este momento, me doy cuenta la importancia de no perder de vista el foco, el propósito, de concentrar la energía en ese plan interior, divino, del alma, el nombre que cada uno sienta.
También es de mucha ayuda al plan, rodearse de personas que vibren en esa misma energía de respeto, libertad, de apoyo, confianza. Como crear una red humana positiva, claro que dar el paso o saltar, es personal, sin embargo, el aliento o simplemente la escucha del otro respetuosa, sin opinión, sin juzgar, suma energía al fuego interno de crear un plan de vida nuevo, mas amoroso, de servicio, alineado con el alma: aprender el amor verdadero hacia uno y hacia los otros. Aunque sean necesarias muchas vidas para ello, tengo esperanza.
PD: Hacer espacio, focalizar, hacer mi parte y entregar los resultados a Dios, al Universo.
Gracias por leer. Abrazo luminoso