¿Cómo es ser Peregrina/o en Tiempos modernos?

Foto del blog

Que todo quepa en una mochila. 

Recuerdo un día a la mañana temprano, antes de entrar al edificio de mi trabajo, y con mi mochila al hombro apareció una sensación: un cuaderno, un lápiz, una cámara y un libro es todo lo que necesito para vivir y ser feliz (plenitud, significado). Viajar, escribir, filmar historias, generar trabajo y hacer servicio con ello. 

Re aparece la idea de reducción. ¿En verdad necesito todo lo que tengo? ¿Acaso tantas cosas generan mas apego y miedo a perderlas? Con una mano en el corazón que necesito? 

De a poco lo esencial se abre paso, antes pedía permiso y ahora el Espíritu va tomando lugar. Aunque si yo no me dispongo a abrirle ese paso y quitar mis propias malezas que obstaculizan su fluidez y crecimiento, nada sucedará. Como una plantita chiquita necesita que la cuide, que la mime, que le ponga atención todos los días. 

Que todo entre en una mochila me da la idea de liviandad, movilidad con facilidad, ligera de cargas mentales, emocionales, físicas. Al menos intentarlo paso a paso. Siento que practicar un desprendimiento con cada paso al caminar, quizás sea un modo de peregrinar. 

Confío que esa peregrinación es posible y, cuando uno empieza se encuentra con otros peregrinos, se comparte la palabra, la oración y aunque cueste animarse, empieza un cambio interior que ya no se puede negar, aunque los apegos mentales quieran tomar todo el espacio interior, hay que insistir en agrandar lo bueno.   

Consagrarse, pedir, orar y seguir caminando hacia El Amado Interior y Universal.

Gracias por leer y estar. Abrazo luminoso. 
 

PD: ¿Es posible peregrinar en mi vida, tal cual es hoy? Claro que si y voy sintiendo esta necesidad de ir soltando de a poco.  

Comentarios

Publicar un comentario